Empatía y comunicación considerada

 Introducción

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“La empatía es una comprensión respetuosa de lo que otros están experimentando” (Marshall Rosenberg).

Se trata de escuchar no sólo con nuestros oídos o con nuestras mentes, sino con todo nuestro ser. Por lo general, seguimos adelante y analizamos lo que estamos escuchando y tratamos de arreglar la situación, ese comportamiento nos impide estar presentes a los sentimientos y necesidades de la persona a través de nosotros.

“Damos a los demás el tiempo y el espacio que necesitan para expresarse plenamente y sentirse comprendidos” (Marshall Rosenberg).

La empatía es muy importante para ayudar a otros a desarrollar sus mejores potencialidades.

Carl Rogers explica una manera de ayudar a otros creando una relación donde el docente muestra sistemáticamente actitudes positivas e incondicionales, empatía y congruencia. Esto facilita que el alumno acepte y reconozca sus propios sentimientos, impulsos y deseos. Por lo tanto, el alumno puede conocerse mejor a sí mismo y puede aceptar y permanecer fiel a sí mismo, lo que significa ser auténtico, congruente y asertivo.

PROPIA EMPATÍA

Manténgase conectado a lo que está pasando en usted.

Preste atención a sus necesidades y valores.

Manténgase conectado a su voz interior, incluso cuando tiende a evitar o distraer.

Puede decirse a si mismo:

“Me encanta cuando recibo ………………………………”

(Rellene el espacio en blanco con una necesidad /valor suyo).

p.ej.
“Me encanta cuando obtengo entendimiento”

Trate de no especificar o mencionar la fuente para satisfacer sus necesidades como “Me encanta cuando recibo la comprensión de mi marido”

Objetivo personal:

Recuerdo mis necesidades y valores para ser capaz de responder a lo que quiero y necesito en lugar de reaccionar a lo que no quiero o no necesito.
(Por ejemplo, si desea escuchar su necesidad, puede pedirle a la otra persona que la escuche sin interrumpirla, en lugar de gritarles por no escucharla).

ESCUCHA ACTIVA

Ser escuchado es una experiencia única. Muy pocas personas están escuchando lo que la persona tiene que decir. Escuchar es una habilidad que todos pueden aprender y desarrollar. Por lo general, el nivel que estamos usando para escuchar es superficial. Normalmente nos estamos enfocando en las palabras, en lo que dijimos y lo que la otra persona dijo. Otras veces nos desconectamos de la conversación y estamos pensando en lo que vamos a decir a continuación, para resolver el problema o para cuidar de los sentimientos de la persona a través de nosotros.

Esto no es la escucha activa.

Escuchar en un nivel profundo y sustancial requiere minimizar la evaluación y el juicio de lo que estamos escuchando.

Escuchar requiere conciencia.

Estamos escuchando no sólo con nuestros oídos, sino también con el resto de nuestros sentidos. Estamos recibiendo información a través de múltiples canales como imágenes, sentimientos, energía e intuición. Observamos la respiración de la otra persona cuando hablamos por teléfono, el ritmo, la modulación, el tono de la voz. En persona, podemos notar el lenguaje corporal. No estamos escuchando sólo a la persona, sino también a todo lo que está sucediendo en torno a nuestra conversación. En el entorno que nos rodea. Eso significa estar al tanto de lo que estamos escuchando.

Después de eso y siendo conscientes de lo que estamos escuchando, podemos decidir y actuar sobre cómo vamos a responder y cómo vamos a hacer un buen uso de nuestra conciencia. Por lo tanto, escuchar incluye la acción y no es un comportamiento pasivo de la audición como solemos pensar.

El nivel profundo de escuchar a menudo se describe como “escuchar el medio ambiente”. Artistas como actores, músicos, formadores están trabajando en su capacidad de “leer” una habitación y monitorear los cambios que están sucediendo en respuesta a lo que están haciendo. Esas personas aprenden a escuchar las señales ambientales, leen su impacto en las personas y ajustan su comportamiento en consecuencia.
La escucha activa está presente. Presente con todos nuestros sentidos para que la persona nos hable. Cuando la gente se da cuenta de que realmente se está escuchando, entonces se abren, se sienten seguros, confían, se están haciendo presentes.

¡Así pues, hay el punto donde la gente se encuentra y la comunicación comienza!

 Actividad

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Título: “Camina un kilómetro con mis zapatos”

Objetivo: Familiarizarse con la perspectiva empática de la comunicación y practicar la capacidad de empatía en diferentes situaciones.

Contenidos: Croquis y preguntas

Material: Esbozos y posible su propia pluma y bloc de notas.

Por favor, reflexione sobre las respectivas siguientes situaciones y conteste a las preguntas respectivas.

Tómese el tiempo necesario para contemplar las situaciones dadas.

CROQUIS 1

  • ¿Cuáles son tus pensamientos cuando miras este croquis?
  • ¿Cómo te sientes?
  • ¿Cómo crees que se siente la madre?
  • ¿Qué piensas acerca de cómo se siente el profesor?
  • ¿Cómo crees que se siente el estudiante?
  • ¿Cómo podría el profesor gestionar esta situación?

CROQUIS 2

  • ¿Cuáles son tus pensamientos cuando miras este croquis?
  • ¿Cómo te sientes?
  • ¿Cómo crees que se siente el estudiante A?
  • ¿Cómo crees que se siente el estudiante B?
  • ¿Cómo podría el profesor gestionar esta situación?

CROQUIS 3

  • ¿Cuáles son tus pensamientos cuando miras este croquis?
  • ¿Cómo te sientes?
  • ¿Cómo crees que se siente el estudiante A?
  • ¿Cómo crees que se siente el estudiante B?
  • ¿Cómo podría el profesor gestionar esta situación?

 Caso de estudio

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CROQUIS 4

Un estudiante de primer grado está en el aula y salta sobre la mesa. Paul el maestro está entrando en el aula después de que suene la campana. El estudiante sigue estando en la mesa lanzando cosas. Otros estudiantes se quejan de su comportamiento porque él les ha roto varios artículos personales. Hay mucho ruido y gritos. Paul está de pie en medio del aula y parece dividido con sentimientos encontrados. Paul al principio sintió ira y frustración cuando se enfrentó al estudiante desobediente, pero al mismo tiempo se sentía culpable porque estaba teniendo dificultades para hacer que el pequeño estudiante le escuchara y cumplir así con las reglas del aula. Paul comenzó a gritarle y le pidió que se sentara y se callara. El estudiante siguió gritando y esta vez aún más fuerte. Paul pensó que el estudiante podría querer expresar algunas necesidades que tenía y que no podían ser satisfechas el aula.

Entonces, Paul se acercó al pequeño estudiante y le pidió amablemente que se sentara. Paul le sugirió que hablasen durante el próximo descanso las razones por las que el estudiante se había comportado así.

Preguntas de reflexión:

  • ¿De qué manera la escucha activa ayudará a Paul en esa discusión con su estudiante?
  • ¿Hay otros sentimientos que Paul pueda tener y por qué?
  • ¿Qué necesidades puede tener el estudiante que no puede expresarlas de manera efectiva?