La comprensión de la función comunicativa de la conducta es un tema importante en la gestión de los comportamientos de los alumnos. La siguiente es una adopción del modelo multi-elemento basado en el trabajo de LaVigna y Willis (1995) y descrito con más detalle en un artículo de Tim Cooke (2012). El mensaje central es que el comportamiento difícil se refiere a que un niño intenta comunicar una necesidad o resolver un problema de una manera inadecuada y a menudo ineficaz.

Para entender lo que un niño quiere comunicar, es útil formular hipótesis sobre su mensaje para abordar el problema. Un paso siguiente consiste en hacer las modificaciones necesarias en el ambiente y en la enseñanza con el fin de apoyar al niño en la solución del problema de manera adecuada. Esta medida de intervención puede incluir apoyo para encontrar formas alternativas que cumplan el mismo propósito o acepten que el problema no puede ser resuelto. Si no se aborda la necesidad del alumno, puede conducir a trastornos de frustración y de comportamiento.

Mantener registros precisos con respecto a la ocurrencia del comportamiento difícil ayuda a identificar patrones consistentes y por lo tanto mensajes consistentes.

El modelo multi-elemento sigue dos líneas principales, que comprenden diferentes enfoques basados en la comprensión del mensaje comunicado expresado por el comportamiento difícil de los alumnos. La primera línea incluye los denominados enfoques proactivos, que se centran en el impacto futuro de la intervención mediante la enseñanza de nuevos comportamientos. El segundo se enfoca en estrategias de respuesta para tratar incidentes actuales. Una intervención integral debe incluir ambas líneas, de acuerdo con los partidiarios del modelo multi-elemento.

El enfoque proactivo sigue las siguientes estrategias:

• Adaptación del entorno del niño según sus necesidades.
• Apoyo para la adquisición de nuevas habilidades, que ayuden al niño a enfrentarse a las situaciones para encontrar alternativas o aceptar que las necesidades no se satisfacen.
• Refuerzo: Apoya la comprensión de que la adquisición de nuevas habilidades y del cambio de comportamiento son más difíciles que permanecer con los viejos hábitos. La intervención debe dejar claro que es más gratificante para el niño poner esfuerzo en la demostración de las nuevas habilidades.
• Las estrategias de respuesta reflejan el comportamiento de respuesta del maestro en caso de comportamiento difícil del estudiante. Se sugiere aclarar las consecuencias de tal comportamiento en una situación en la que el alumno se tranquilice en lugar de estar en medio de una situación problemática para prevenir su aumento.

De acuerdo con este modelo, un plan integral debe incluir lo siguiente:

• Comprensión del mensaje comunicado que se expresa por el comportamiento del niño.
• Adaptaciones al entorno para satisfacer las necesidades del niño afectado.

Las sugerencias para las estrategias a aplicar para apoyar al niño en el cambio de su comportamiento pueden ser:

• Recompensar cuando se muestra el comportamiento deseado o se hacen esfuerzos relacionados.
• Preparación de formas de respuesta cuando se muestra un comportamiento difícil.

PASO 1

Título: Criterios de conducta disruptiva

Objetivo: Aumentar la sensibilización de los maestros para identificar el cambio de comportamiento de los alumnos

Contenidos: Ciertos comportamientos de los alumnos pueden convertirse en “desafiantes, difíciles” si se cumplen los siguientes criterios:

• Persistencia: el comportamiento disruptivo se repite o incluso se vuelve persistente. Por ejemplo, un incidente aislado de gritar durante las lecciones no es motivo de preocupación, pero si un alumno muestra este tipo de comportamiento persistentemente y no se aborda, la interrupción tendrá un impacto en la atmósfera de la clase y la concentración de todo el grupo.
• Severidad: el comportamiento de los alumnos puede caracterizarse como un desafío, cuando las situaciones están cargadas emocionalmente y amenazan con aumentar. Estas situaciones requieren la acción inmediata de los docentes, es decir, cuando ocurre un comportamiento violento.
• Inusual para la edad / etapa del niño: el comportamiento de los alumnos debe ser considerado en el contexto de la edad y la etapa de su desarrollo. Por ejemplo, la mayoría de los niños de primaria son capaces de sentarse quietos y tranquilos y concentrarse en una tarea durante un período significativamente más largo que los niños más pequeños, que tienen un lapso de concentración más corto.

En esta actividad, piense en una situación para cada uno de los criterios, que probablemente ya haya experimentado en su contexto profesional. Descríbalas en forma de un cuento y reflexione sobre los siguientes puntos, que deben incluirse en el texto:

• ¿Quién estuvo involucrado?
• ¿Cuál fue el problema?
• ¿Qué tipo de comportamiento disruptivo mostró el alumno?
• ¿Cómo podría interpretarse?
• ¿Cómo intervino?
• ¿Fue ese método la elección correcta?
• ¿Qué haría ahora si una situación similar volviera a ocurrir?

Material: Papel, bolígrafos

PASO 2

Título: Cree su propio plan de actuación

Objetivo: Analizar los comportamientos desafiantes, difíciles y aplicar la estrategia adecuada de afrontamiento

Contenidos: En esta actividad, se le pide que elabore un plan de actuación que pueda funcionar como una herramienta para su uso en clase para los alumnos que muestran un comportamiento difícil. Este plan de actuación está inspirado en el modelo de comunicación multi-elemento. En un primer paso, tome un pedazo de papel y un bolígrafo y dibuje una matriz simple con dos filas y dos columnas. Encima de la tabla, indique el objetivo que se debe alcanzar. En la primera fila, en la columna de la izquierda indique “cambios ambientales” que deben hacerse, y “nuevas habilidades” que deben adquirirse en la columna de la derecha. En la fila siguiente, escriba “refuerzo” a la izquierda y “estrategias reactivas” a la derecha. La estructura debe ser comparable al siguiente ejemplo ilustrativo:

Objetivo:
Cambios ambientales … …	Nuevas destrezas … …
Refuerzo … …	Estrategias reactivas … …

Este borrador simple puede ayudarle como una herramienta para definir acciones concretas sobre cómo manejar un comportamiento individual difícil. Sobre la base de este borrador, se le invita a desarrollar más y crear su propio “plan de actuación”. Es libre de incluir cualquier criterio que le parezca apropiado para usted y sus alumnos y basado en lo que sabe de su experiencia profesional. Si desea inspiración, la sugerencia para los criterios a añadir podría referirse a:

• Documentación de los avances
• Modificación de objetivos
• “Mejores prácticas”
• Inclusión de otros actores como el director, los padres, etc.

Material: Papel, bolígrafos

Descripción: En este ejercicio se describe el caso ficticio de un alumno con una condición de salud especial. El comportamiento difícil viene de sus compañeros de clase. Se pide que lea el texto y que responda las preguntas.

La alumna llamada Mona tiene ocho años y tiene una condición que hace que los huesos de sus piernas crezcan de manera diferente. Como resultado, se mueve más lento que el resto de sus compañeros de clase. Estos fingen que les gustaría jugar con ella, pero huyen de ella. Incapaz de ponerse al día, se queda sola. Esto sucede principalmente a la hora del almuerzo y durante los descansos. En las actividades prácticas de la clase de ciencias, los compañeros de clase indican que no quieren trabajar con ella ni siquiera acercarse a ella. En los deportes, es la última en ser elegida en los juegos de equipo. Mona tiene problemas de sueño y no tiene ganas de ir a la escuela.

Preguntas de reflexión:

• ¿Dirías que los compañeros de Mona la intimidan? Si es así, ¿de qué manera?
• Si fueras el profesor de Mona, ¿intervendrías?
• Si es que sí. ¿De qué manera? ¿Qué métodos de intervención utilizarías?
• ¿Cómo se puede sensibilizar a la clase?
• ¿Qué se puede hacer para integrar a Mona y evitar que se deprima más?